Fecha: 10 de Abril de 2018
Creo que me estoy haciendo mayor...
Como cuando se sale a por tabaco y se pierde la conciencia y la consciencia, vamos la vergüenza. Eso le pasa a las personas(por decir algo) que vienen a Gijón para hacer su "fiesta" particular llamándola despedida de soltería. Pierden el pudor y el decoro mínimo que tendrían en su lugar de origen, donde viven su día a día. No se plantean en ningún momento la repercusión de sus actos, se sienten ajenos a todo y, a la vez, centro de atención de todos. Es una mezcla extraña de carencia de pudor y de altanería chabacana, como un carnaval grotesco reducido a grupúsculos que circulan por la ciudad en época y hora alejada de la normalidad, de una convivencia cívica y respetuosa. Las formas y las normas se las pasan por el arco con total impunidad, sintiéndose estrellas invitadas, haciendo un pasa-calles divertido, de mirada nublada y risas histéricas: la cosa es hacerse notar: que se vea que "estamos aquí" y "lo chul@s que somos", sin apenas reparar en el entorno en el que se están moviendo. No son conscientes de lo bárbaros que son(salvajes), las personas con las que se tropiezan son de todas las edades y posiciones, y en muchos casos con niños que se topan con situaciones difíciles de entender.
La diversión es necesaria para todas las personas, forma parte elemental del vivir, pero eso no significa que todo el campo está para pisotearlo, no, hay parcelas para diferentes cultivos, pastos, ocios..., delimitados para la buena distribución de los espacios-tiempos, para la mejor convivencia, para ser razonables y que el respeto sea la base principal de nuestro caminar. Todos nos equivocamos, qué duda cabe, pero reaccionamos y enderezamos el rumbo, nos disculpamos procurando no volver a los mismos errores. Debemos ser comprensivos con las diversiones de los demás, pero quién se divierte ha de tener en cuenta, que una inmensa mayoría no está en su fiesta, ni siquiera quiere fiesta, esa fiesta. Deberían de respetar la ciudad que les acoge, dándoles cancha para sus festejos, mostrando una actitud más decorosa y educada, que guarden unas formas mínimas y que en locales dispuestos a acogerlos encuentren la posibilidad de diversión que buscan y quieren. Que sea su fiesta y la disfruten sin que haya queja alguna. ¡Qué vivan l@s novi@s!.
Checafe